El impacto de la gestión de la COVID-19 en la defensa de los derechos humanos en el Maghreb
Publicamos tres informes que analizan el impacto de la gestión de la crisis sanitaria del COVID-19 y de la crisis climática en los derechos humanos en Argelia, Túnez y Libia.
La conclusión de los tres informes es que la gestión de la pandemia de la COVID-19 ha permitido a los estados aumentar su control sobre la población, incrementando así las violaciones sobre derechos civiles y políticos.
Podéis descargar los informes:
La tendencia global que nos acerca a sistemas de gobierno más autoritarios se constata en la región del norte de África; lo que hace que el trabajo de defensa y promoción de los derechos humanos sea hoy aún más necesario. Las estrategias en este sentido son, sin embargo, particulares y diferentes según el país y región en la que queramos intervenir.
Los diagnósticos fueron realizados por diferentes equipos de especialistas en cada uno de los países, siguiendo una metodología que consistió en una consulta participativa con personas estratégicas de la sociedad civil e instituciones y personas defensoras de derechos humanos. A este proceso cualitativo de recogida de información se le suma la revisión de informes, comunicados, artículos y otra bibliografía o fuentes relevantes.
Cada diagnóstico se ha encontrado con diferentes condicionantes en aspectos como la cobertura geográfica, temáticas centrales de estudio, representatividad de género, o medios utilizados para la realización de las entrevistas. Finalmente, se han realizado más de 100 entrevistas en total, con la participación de 40 mujeres – con una representación muy baja de este género en el diagnóstico en Libia.
El proceso de diagnóstico y elaboración de las recomendaciones recogidas en cada informe se basó en el principio de la inteligencia colectiva y en las herramientas de deliberación participativa (consulta y consenso), asegurando que todos y todas las participantes tuvieran la misma voz en las entrevistas y sobre todo protegiendo la identidad de los y las entrevistadas.
Estos informes nacen en el marco del proyecto WAHDA – “unidad” en árabe – que se enfoca en promover el rol activo de la sociedad civil tunecina como garantía de defensa de los derechos civiles y políticos, y en el fomento de la cohesión social. Ambas dimensiones se consideran esenciales para avanzar en la transición política del país e, incluso, en la estabilidad regional. Esta propuesta contó con el financiamiento de la Agencia Catalana de Cooperación para el Desarrollo y se vio reforzada por el trabajo realizado por el proyecto IMCAN – “dar oportunidades” en árabe coloquial – financiado por el Ayuntamiento de Barcelona, el cual busca promover la garantía del ejercicio de los derechos humanos a través del refuerzo de sus defensores y defensoras.
Ambos proyectos, liderados por NOVACT, contaron con la participación activa de Liga Tunecina de defensa de Derechos Humanos (LTDH) , y, en el caso de WAHDA, con la Fundació Solidaritat de la Universidad de Barcelona (FSUB) y la Universidad de Cartago . Además, estuvieron involucradas otras entidades de la región como la Liga Argelina de Defensa de Derechos Humanos (LADDH).